Infiel (I)

No me voy a lamentar por lo que no fue, si me duele que no terminaste a mi lado, que nuestra relación se quedó sin nombre, y que lo que hubo entre nosotros sólo fue “momentos” los cuales siempre recordaré, pero ya basta de esperar por algo, de confiar en esa magia que nos envolvió aquel día en la playa, en esas - buenas noches - que ignoré por estar comprometida, y que luego de ese día debí seguir ignorando por respeto. Pero fue inevitable, yo estaba ya cansada de la rutina, que me quisieran cambiar, que no aceptaran que soy como soy, estaba harta de lo mismo, de conformarme de luchar sin ganas con alguien que sólo pensaba en su bienestar y su felicidad sin pensar en mis prioridades.

Y si, terminé siendo infiel, porque después de ese día no hacía más que pensarte, que buscarte en todas partes sabiendo cuál era tu sitio en la vida, armando excusas, buscando un viaje que me llevara a verte, obviando que tenía una pareja estable la primera en mi vida, mi primer hombre en realidad. Y es que no me importó nada desde el mismo instante en que me dijiste me gusta como eres y precisamente, contigo estaba siendo lo más auténtica que pude ser. Luego, unas conversaciones más nos acercaron y no recuerdo cómo pero se que llegaste y me esperaste en una habitación de hotel, mi primera locura, que para escapar recuerdo usé la excusa de una amiga.

No sé de donde saque tanta fuerza, no sabía que sería tan cara dura con esa mentira, pero ahí llegué a la puerta toqué y en ese preciso instante entendí que no había vuelta atrás, ya estaba en el sitio, ya estaba contigo y lo que sucedió en ese cuarto para mi fue algo que nunca tuvo palabras para explicar, tú, tú fuiste más que sexo, más que una aventura, tú me diste, hasta ese día, lo que nunca había tenido, una cantidad de sensaciones… y ya teniendo 2 años con aquél hombre, fuiste tú quien me hizo el amor, quien me hizo sentir más allá de la pasión, la locura.

Ese día no se me olvida, pero procuraré que así sea porque aunque me diste el cielo en sólo una noche, quiero vivir más que en ese cielo con alguien más y para siempre. Luego de ese día, sucedió nuevamente y esta vez fui yo que sin importarme nada invente otra excusa para viajar el día de tu cumpleaños y sorprenderte, seguía yo con ese novio conformista, inocente y enamorado, que definitivamente ya no quería en mi vida, mi sorpresa funcionó, no sabías de mi visita y menos ese día tan especial, y yo que no me creí capaz nunca de hacer tal cosa, ¡qué descaro!

Lo que vino después de esa noche fue una relación sin nombre, fuiste un verdadero amante hasta que definitivamente terminé esa locura que tenía de noviazgo, y tú y yo quedamos como eso amantes (él también tenía su relación que estaba peor o igual que la mía); en la cama no había cabida para nadie, en nuestro espacio no había más que pasión, había más que amor, no se, era algo inexplicable, algo que aún pienso y se me estremece el cuerpo, algo que aún teniendo otra pareja en mi vida tu persististe, hasta que no aguantaste más mi indecisión.

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