Si por cada granito de felicidad que yo tengo pudiera cambiar la tristeza en el mundo la vida sería otra, no le encuentro sentido a lo que pasa a mi alrededor cuando veo tanta violencia y maldad, se que nadie nace malo pero ¿por qué es malo lo malo?, ¿qué es lo bueno? según quién o qué se determina la maldad, si, creo es una pregunta que hasta tiene respuestas pero yo me las sigo haciendo, sé que no es mucho lo que he hecho para darle a la vida más sentido, pero se que aún encerrada en estas cuatro paredes de mi desordenado cuarto, puedo tratar de alegrar la vida de las personas que acompañan.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

María echame un cuento

Señor Dinero

Gracias a ella.